"Kubo" y Laika, defensores del stop-motion.

Fuente - modogeeks

No explicaré demasiado, ya que no creo que sea necesario si alguna vez vieron el cine que ha producido el estudio de animación Laika. Si nunca vieron ninguna de sus películas, bueno, dejen de leer y preparen todo para ver una este fin de semana. Luego entenderán porque publico esto...

Digo todo esto porque el esfuerzo de este estudio y su capacidad realmente merecen atención. A base de cuatro películas de gran calidad, Laika se ha convertido en el estudio defensor de una técnica casi olvidada debido a la animación en 3D. Me refiero al stop-motion, lo que yo considero como el tipo de animación más fascinante cuando llega a los niveles de esta productora. Esos niveles proponen una animación bella en la que es fácil olvidar que lo que vemos no son más que pequeños muñecos movidos un fotograma a la vez. Así como suena, un nuevo movimiento es un nuevo fotograma para Laika, en donde fabrican segundos de animación que nunca denotan que todo se trata de unas bellas marionetas caseras.

Con la llegada de su cuarto film, Kubo & The Two Strings, me volví a enamorar de este estudio y me enfrenté a su tristeza en la peor de sus facetas. Las tristeza a la que me refiero es que, por más que Laika crea contenidos bellos y amados por muchos, los mismos no gozan de mucho éxito a nivel económico y Kubo fue el caso más claro de todo esto. Este relato sobre un joven embarcado en una bizarra y sentida aventura samurái tocó mi corazón con la llegada de sus créditos, pero no disfrutó de un éxito mencionable, recaudando en cines una suma que apenas logró igualar su modesto presupuesto. Por eso escribo estas pocas palabras, porque realmente me apena que la calidad no reciba la atención que merece. En realidad, podría hablar horas de lo que estas cintas hacen bien, pero no les haría verdadera justicia. Solo ver las películas logrará explicar todo lo que hablo.

En busca dejar algo que demuestre el esfuerzo de este cine, debajo les ofrezco una infografia que explica el arduo trabajo que el estudio prestó a Kubo & The Two Strings.